Las infecciones por hongos pueden ocurrirle a cualquiera, sin importar cuán estricto sea su régimen de higiene o cuán saludable sea. Vivimos en un mundo lleno de bacterias, toxinas, y la mayoría de nosotros tenemos un historial de malos hábitos alimenticios que pueden prepararnos para desarrollar infecciones por hongos más fácilmente. Por ejemplo, las altas cantidades de alimentos procesados, (específicamente el azúcar), la carne y otros alimentos de origen animal, junto con la comida basura y la comida rápida, todos contienen aditivos, productos químicos, hormonas, pesticidas, y dañan nuestras bacterias intestinales y debilitan el sistema inmunológico de nuestro cuerpo.
Los antibióticos y los medicamentos recetados sólo contribuyen a este problema, por lo tanto no somos capaces de luchar contra los hongos que encontramos todos los días como lo haríamos normalmente. O bien, si entra en contacto con alimentos en mal estado, algún tipo de bacteria peligrosa en el ambiente o bebe agua cargada de bacterias, también podría desarrollar una infección por hongos. Las posibilidades son infinitas, y aunque no es necesario que andes asustado todo el tiempo, sigue siendo útil saber cómo combatir las infecciones por hongos de forma más natural con tu dieta en la medida de lo posible. Cuanto más sana sea tu alimentación, más posibilidades tendrá tu sistema inmunitario de prosperar.
Aquí hay algunos alimentos antifúngicos especialmente poderosos para añadir a su régimen:
Coco
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El coco es uno de los mejores alimentos antimicrobianos que puedes consumir y que además viene con muchos otros beneficios. Tiene un alto contenido de ácido láurico y ácido caprílico que se ha demostrado que combate la levadura candida en el cuerpo, que todos tenemos en nuestros sistemas digestivos, pero cuando crece y se vuelve fuera de control, causa síntomas como una erupción o brote, una picazón, fatiga crónica, antojos de azúcar e incluso mal humor y depresión. El contenido de ácido láurico del coco también ayuda a reforzar la inmunidad y sus grasas saludables mejoran la función del hígado.
Trate de utilizar la carne de coco entera (o la manteca de coco) en lugar de sólo el aceite en sus comidas, y luego aplique el aceite en su piel para protegerla de las bacterias insalubres que encuentra en el ambiente. También es una gran loción no tóxica y crema de afeitar.
Ajo
¡Ajo! Un verdadero superalimento?
Otro popular alimento natural que combate las bacterias es el ajo, pero no el polvo de ajo o el ajo pre-picado en la tienda – dientes de ajo fresco. El ajo contiene vitamina B6, potasio, desintoxica el cuerpo, aumenta la inmunidad, fortalece el hígado y promueve un corazón sano. El ajo combate específicamente las bacterias en el tracto digestivo y ayuda a construir las bacterias buenas, ya que es un alimento prebiótico natural.
Usa un diente al día para obtener los beneficios; esto es fácil de hacer si pones un poco de ajo fresco en una ensalada, en algunas verduras asadas o en la sopa, o si comes crudo, los dientes son fáciles de hacer puré en sopas y salsas crudas. Aquí tienes algunos consejos fáciles para cultivar tu propio ajo si quieres probarlo también.
Oregano
Theola Yuen/Flickr
Mucha gente utiliza el aceite de orégano para combatir las bacterias, pero la hoja entera también es una opción inteligente. El orégano es una de las hierbas más fáciles de cultivar por uno mismo y también una de las más nutritivas. Unas cuantas hojas (aproximadamente una cucharada) contienen más antioxidantes que una taza entera de arándanos.
Ayuda a combatir las bacterias en el cuerpo, fortalece el sistema inmunológico e incluso reduce el estrés debido a los altos niveles de vitamina B6. El orégano también es una fuente natural de clorofila que también combate las bacterias y la acidez. Además, seamos sinceros, ¡es bastante delicioso!
Semillas de calabaza
Las semillas de calabaza son especialmente útiles para combatir los parásitos (que sí, son muy fáciles de encontrar a través de la comida, el agua e incluso el contacto con los animales y el público en general). Contienen propiedades que se unen a los parásitos y ayudan a excretarlos a través del tracto digestivo. Las semillas de calabaza son también una maravillosa fuente de proteínas de origen vegetal, ya que aportan 13 gramos en sólo 1/4 de taza. Intente comprar semillas de calabaza frescas y crudas (las orgánicas son óptimas) en lugar de las variedades tostadas con aceite y sal para obtener los mayores beneficios.
Las semillas de calabaza son también una fuente ignorada de ácidos grasos omega-3. Los omega-3 ayudan a mejorar la tiroides y pueden aliviar la piel seca que a menudo se asocia con erupciones debido a infecciones de hongos en la piel. Come 1/4 de taza de las semillas al día para comprobar sus beneficios. Puedes usarlas en la avena, dentro o encima de un batido, cubrir la sopa con ellas o picarlas crudas en lugar de las insanas patatas fritas o los dulces.
Cebollas
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Un alimento barato y humilde, las cebollas son una gran adición a tu dieta, no sólo por su sabor, sino también por tu salud. Al igual que el ajo, son saludables para el hígado y el corazón, ayudan a combatir el crecimiento de las bacterias y son perfectas para usar tanto si tienes un resfriado leve como algo más grave, como una infección por hongos. Una de las razones es que tienen muchas propiedades de refuerzo inmunológico. Son una gran fuente de vitamina C, vitamina B6, antioxidantes y potasio. Puedes usarlas crudas o ponerlas en un caldo casero para beber a diario o usarlas como base para una sopa saludable.
También podrías buscar algunas cremas naturales para el cuidado de la piel para las infecciones por hongos que incluyan aceite de árbol de té, orégano y sustancias naturales frente a las opciones basadas en productos químicos de la tienda. Asegúrese de mantener una dieta lo más saludable posible, haciendo hincapié en los alimentos limpios y frescos, y evite los productos animales, el azúcar y los cereales refinados, los alimentos con levadura, como el pan, la cerveza, la levadura de cerveza, los alimentos procesados y la comida rápida. Evite las bebidas energéticas, los refrescos y las bebidas procesadas, y consuma en su lugar agua y té de hierbas. Si tiene que beber café, intente utilizar granos frescos y compre productos orgánicos, ya que el café es un cultivo muy rociado y recubierto de productos químicos.
Intente añadir estos alimentos a su dieta y consulte nuestros 5 consejos sobre cómo mejorar su intestino si necesita más consejos sobre cómo combatir los hongos y los virus de forma más natural.