Por Kate Hodgson &Jessica Mendoza Amanda Knox habla después de que el hombre condenado por la agresión y violación en 2007 de la ex compañera de piso de Knox, la estudiante británica de intercambio Meredith Kercher, sea puesto en libertad.
Rudy Guede, de 34 años, la única persona que sigue cumpliendo condena por la muerte de Kercher, recibió este mes el permiso de un tribunal italiano para terminar el resto de su condena con trabajos comunitarios.
«Sí sé que mucha, mucha, mucha gente ha sufrido mucho por lo que él hizo y sigo sin dejar de sorprenderme de que sea el asesino olvidado», dijo Knox sobre Guede en una entrevista exclusiva que se emitió el lunes en «Good Morning America». «El que fue arropado tranquilamente, condenado por un crimen menor y no tiene que vivir con la carga de ser asociado para siempre con la muerte de Meredith.»
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1El 8 de septiembre de 2016
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2El 27 de marzo de 2015
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El 29 de septiembre, 2016
Knox era una estudiante universitaria de 20 años que estudiaba en el extranjero en Perugia, Italia, cuando ella y Raffale Sollecito, su novio en ese momento, fueron acusados de asesinar a Kercher en noviembre de 2007. Pasaron cerca de cuatro años en una cárcel italiana mientras se desarrollaba el proceso judicial.
Tras el largo calvario judicial, que incluyó dos juicios de apelación y dos decisiones del Tribunal Supremo, Knox y Sollecito fueron finalmente absueltos de asesinato en 2015.
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Los fiscales habían acusado a Knox y Sollecito de matar a Kercher con la ayuda de Guede, un joven de Costa de Marfil que se había criado en Perugia.
Guede, cuyo ADN fue el único encontrado en la escena del crimen, fue condenado por el asesinato de Kercher en otro juicio en 2008. Fue condenado a 16 años de prisión después de que un proceso acelerado diera como resultado menos tiempo de cárcel.
Guede recibió una liberación parcial en 2017 para poder asistir a la escuela y ha estado trabajando en una biblioteca en el centro de Italia y como voluntario para una organización benéfica católica. Su condena debía terminar en 2022.
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Knox, que ahora tiene 33 años y es una defensora de la reforma de la justicia penal, dijo que el «peso» del crimen de Guede recae sobre ella.
«Yo soy la que ha sido condenada a vivir con su infamia», dijo Knox a «GMA». «Y aunque no puedo decir que le desee el sufrimiento o la cárcel, sí que me gustaría que hubiera respondido plenamente por lo que hizo y que reconociera lo que hizo, y no sé si eso ocurrirá alguna vez».
«La única razón por la que saben que existo es por lo que él hizo, y eso es una grave injusticia», dijo.
El año pasado, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo (Francia) confirmó una sentencia anterior según la cual los derechos de defensa de Knox habían sido violados en 2007 durante el interrogatorio policial sobre el asesinato de Kercher.
La sentencia anterior había ordenado a Italia el pago de unos 20.000 dólares en concepto de daños y perjuicios y costas judiciales a Knox por no haberle facilitado un abogado o un traductor adecuado durante las horas de interrogatorio policial del 6 de noviembre de 2007, durante las fases iniciales de la investigación del asesinato de Kercher.
