La atribución disposicional es un fenómeno poco comprendido en la psicología de la personalidad que se cree que explica el comportamiento humano a nivel de un actor social individual. Se cree que está causada por características internas que residen en el individuo, en contraposición a las influencias externas (situacionales) que provienen del entorno o la cultura en la que se encuentra ese individuo.
Otro término para la atribución disposicional es la atribución interna, o inferir que los factores personales son la causa de un evento o comportamiento.
Las atribuciones se refieren a las influencias que usted hace con respecto a lo que causó un evento o comportamiento y son su intento de comprender sus experiencias, comportamientos y las conductas de los demás. Cuando utilizamos las atribuciones internas, inferimos que una persona se comporta de una manera determinada o que un evento se debe a factores relacionados con la persona. La atribución interna se define como el acto de culpar a algún tipo de factor o criterio que podría ser controlado por un individuo por la causa de un determinado evento. Al hacer una atribución interna, inferimos que un acontecimiento o el comportamiento de una persona se correlaciona directamente con factores personales como rasgos, habilidades o sentimientos. Un ejemplo simplificado de esto puede mostrarse cuando una mujer está pagando su compra en la caja registradora. Cuando un cajero es cortante con ella en el supermercado, la mujer decide que debe ser una persona grosera y malhumorada todo el tiempo. La atribución interna es la forma en que atribuimos significado a los comportamientos de los demás e incluso a los nuestros.