El balinés es una raza oriental con un pelaje fino y sedoso y marcas oscuras (llamadas «puntos») en su cara en forma de cuña, sus patas delgadas y su larga cola. En su aspecto general, el balinés se parece a una versión de pelo más largo del siamés, que es en realidad lo que es. No tienen un subpelo lanoso y son mucho menos peludos que la mayoría de las otras razas de pelo largo y semilargo. No están predispuestos a desarrollar un pelaje enmarañado. La Asociación Americana de Aficionados a los Gatos (CFA) sólo reconoce ciertos colores de pelaje en el balinés, que son los mismos que los del siamés de raza pura: seal point, blue point, chocolate point y lilac point. Sin embargo, en mayo de 2008 se añadieron al estándar de la raza otras variantes de color, bajo lo que ahora se denomina División Javanesa. Éstas incluyen: points de color sólido crema, rojo, ahumado y plateado; lynx (tabby) points en azul, azul-crema, chocolate, chocolate-tortie, canela, canela-tortie, crema, leonado, leonado-crema, lila, lila-crema, rojo, seal, seal-tortie, ahumado y plateado; y parti-color points en azul-crema, chocolate-tortie, canela-tortie, leonado-crema, lila-crema, seal-tortie, ahumado y plateado. Los gatitos balineses nacen con un pelaje pálido y desarrollan sus puntos más oscuros a medida que envejecen. Los gatos adultos tienden a seguir oscureciéndose con el tiempo. Los balineses tienen ojos brillantes de color azul zafiro y orejas grandes y anchas. La CFA los describe como «un gato esbelto y delicado, con líneas largas y afiladas, muy ágil pero musculoso». Todo en el balinés es L-O-N-G, desde la punta de su nariz hasta el final de su cola de plumas espectaculares, que es uno de sus rasgos más distintivos. Estos gatos son fáciles de cuidar, requieren poco aseo y suelen ser menos ruidosos que sus primos siameses. En definitiva, se trata de una raza elegante, refinada, grácil y extremadamente inteligente.

A pesar de su apariencia aristocrática, los balineses son gatos cariñosos, amistosos y con aspecto de payasos, con personalidades individuales bien definidas. Son curiosos y pueden ser bastante exigentes con la atención de sus dueños. Sin embargo, a veces sólo muestran su lado afable a los miembros de su familia humana y felina. Algunos autores han descrito al balinés como curioso pero un poco distante con los extraños, aunque esto es objeto de debate entre los entusiastas de la raza.

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