Bingo, también llamado Loto, juego de azar que utiliza cartones en los que hay una cuadrícula de números, una fila de los cuales constituye una ganancia cuando han sido elegidos al azar. El bingo es una de las formas de juego de bajo precio más populares del mundo.

Para jugar al bingo, que es una forma de lotería, cada jugador compra uno o varios cartones divididos en casillas numeradas y en blanco. Unos números elegidos al azar, normalmente hasta el 75 o el 90, son llamados por un «banquero». El primer jugador que consiga un cartón (o una línea) en el que se hayan pronunciado todos los números grita «bingo» o «casa» y cobra todo el dinero de la apuesta, normalmente menos un porcentaje determinado, si lo permite la legislación local. En otra variante popular, la casilla central del cartón está libre, y el primer jugador en cuyo cartón aparezcan cinco números seguidos -en vertical, horizontal o diagonal- es el ganador. El premio (bote) puede ascender a miles de dólares. El bingo es legal en la mayoría de los estados de Estados Unidos que prohíben otras formas de juego. Está permitido en Irlanda cuando los beneficios se destinan a la caridad; y está estrechamente regulado en el Reino Unido, donde las salas de lotería fueron sometidas a un impuesto en 1966.

El bingo ha tenido muchos nombres y variaciones. El nombre más antiguo, lotto (o loto), un juego infantil, se registró por primera vez en 1778. La forma original americana, llamada keno, kino o po-keno, data de principios del siglo XIX. La única forma de juego permitida en los servicios armados británicos, el juego se llama en la Royal Navy tombola (1880) y en el Ejército, house (1900), o housy-housy. Otros nombres americanos son beano, lucky, radio y fortune. En el punto álgido de su popularidad, durante la Gran Depresión de los años 30, se jugaba una variante (a menudo llamada screeno) en los cines, con una noche de la semana designada como noche del banco, en la que los clientes recibían cartones de bingo gratis con sus boletos de entrada; los premios ascendían a cientos de dólares en efectivo o mercancías.

El bingo se ha jugado con entusiasmo en Japón e incluso se ha introducido en el casino de Monte-Carlo. En Gran Bretaña el juego recibió su mayor impulso cuando la Ley de Apuestas y Juegos de 1960 permitió la formación de un gran número de clubes comerciales de lotería. En pocos años, el juego alcanzó una popularidad que igualaba o superaba la que había tenido en Estados Unidos.

Obtenga una suscripción a Britannica Premium y acceda a contenidos exclusivos. Suscríbase ahora

admin

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

lg