FormaciónEditar

México en 1824. Coahuila y Tejas es el estado más nororiental.

En 1821, la Guerra de Independencia de México cortó el control que España había ejercido sobre sus territorios de América del Norte, y el nuevo país de México se formó con gran parte de las tierras que habían conformado la Nueva España. En los primeros tiempos del país, hubo muchos desacuerdos sobre si México debía ser una república federal o una monarquía constitucional. En 1824, una nueva constitución reestructuró el país como una república federal con diecinueve estados y cuatro territorios. Uno de los nuevos estados era Coahuila y Tejas, que combinaba las poco pobladas provincias españolas de Texas y Coahuila. Coahuila y Tejas, el estado más pobre de la federación mexicana, abarcaba los límites de la Texas española, pero no incluía la zona de El Paso, que pertenecía al estado de Chihuahua, ni la zona de Laredo, Texas, que pasó a formar parte de Tamaulipas.

Erasmo Seguin, representante de Texas en el Congreso durante las deliberaciones constitucionales, abogó originalmente por que Texas se convirtiera en un territorio federal. Sabía que la pequeña población de Texas y sus insuficientes recursos hacían que la región no estuviera preparada para ser un estado independiente, y que el gobierno federal tenía la obligación de ayudar a los territorios. Como Coahuila era más poblado que Texas, temía que en un estado combinado Coahuila tuviera más poder en la toma de decisiones. Al representante de Coahuila, Miguel Ramos Arizpe, también le preocupaba que su región no estuviera preparada para convertirse en un estado independiente. Ramos Arizpe no estaba dispuesto a unirse con otros estados cercanos, ya que Coahuila se comparaba desfavorablemente con esos estados tanto en población como en economía y, por tanto, sería un socio más débil. Para convencer a los tejanos de que se unieran a Coahuila, Ramos Arizpe escribió al ayuntamiento de Bexar para advertir a los líderes políticos que un territorio perdería la propiedad de las tierras públicas a favor del gobierno federal. Los gobiernos estatales conservaban la propiedad de las tierras públicas. Esto fue suficiente para persuadir a los tejanos de que abandonaran su oposición a la fusión.

Inmigración y esclavitudEditar

El gobierno federal tenía poco dinero para el ejército, por lo que los colonos fueron autorizados a crear sus propias milicias para ayudar a controlar a las tribus nativas hostiles. La región fronteriza de Texas se enfrentaba a frecuentes incursiones de las tribus apaches y comanches. Con la esperanza de que una afluencia de colonos pudiera controlar las incursiones, el gobierno liberalizó sus políticas de inmigración y se permitió a los colonos de Estados Unidos trasladarse a México.

Los estados eran responsables de aplicar la Ley General de Colonización. Los funcionarios de Saltillo, la capital de Coahuila y Tejas, pronto se vieron asediados por especuladores de tierras extranjeros que querían reclamar tierras en Texas. El estado aprobó su propia ley de colonización en 1825. Se presentaron aproximadamente 3.420 solicitudes de concesión de tierras por parte de inmigrantes y ciudadanos naturalizados, muchos de ellos angloamericanos. Sólo uno de los veinticuatro empresarios, Martín De León, asentó a ciudadanos del interior de México; los demás procedían principalmente de Estados Unidos.

Desde que México se independizó de España, hubo apoyo público a la abolición de la esclavitud. El temor a una crisis económica si se liberaban todos los esclavos simultáneamente condujo a una política de emancipación gradual. En 1823, México prohibió la venta o la compra de esclavos y exigió que los hijos de los esclavos fueran liberados al cumplir los catorce años. Cualquier esclavo introducido en México por compra o comercio también sería liberado. Sin embargo, muchos de los colonos de Texas ya habían tenido esclavos y los habían traído al nuevo territorio cuando emigraron de Estados Unidos.

En 1827, la legislatura de Coahuila y Tejas prohibió la admisión de más esclavos en el estado y concedió la libertad al nacer a todos los hijos de una esclava. Las nuevas leyes también establecían que cualquier esclavo traído a Texas debía ser liberado en seis meses. Dos años después, la esclavitud se prohibió oficialmente en México. Los colonos americanos de Texas empezaron a hablar de rebelión. El gobernador de Coahuila y Tejas, José María Viesca, escribió al presidente para explicarle la importancia de la esclavitud para la economía del este de Texas, y la importancia de la economía de Texas para el desarrollo del estado. Texas fue eximido temporalmente de la norma de prohibición de la esclavitud. En 1830, el estado recibió la orden de cumplir íntegramente la ley de emancipación. Muchos colonos convirtieron a sus esclavos en sirvientes con plazos de 99 años, una práctica que el estado también prohibió en 1832.

TensionesEditar

A medida que el número de estadounidenses que vivían en Texas florecía, las autoridades mexicanas empezaron a temer que Estados Unidos deseara anexionarse la zona, posiblemente utilizando la fuerza. El 6 de abril de 1830, el gobierno mexicano aprobó una serie de leyes que restringían la inmigración de los Estados Unidos a Texas. Las leyes también cancelaban todos los contratos de empresarios no cumplidos y exigían la primera aplicación de los derechos de aduana. La aplicación de las nuevas leyes enfureció a los colonos de Texas, y en junio de 1832 un grupo de colonos armados marchó sobre la base militar de Anáhuac y depuso al comandante, Juan Davis Bradburn. Un segundo grupo forzó la rendición de otro comandante militar mexicano en la batalla de Velasco. La pequeña rebelión coincidió con una revuelta encabezada por el general Antonio López de Santa Anna contra la política centralista del presidente mexicano Anastasio Bustamante. Los tejanos se alinearon con las políticas federalistas de Santa Anna.

Los colonos de Texas siguieron presionando para que se modificaran las leyes mexicanas. En 1833, solicitaron la condición de estado separado, llegando a redactar una propuesta de constitución estatal.

En marzo de 1833, la capital del estado fue trasladada de Saltillo a Monclova, que estaba más cerca de Tejas. Poco después, estalló la guerra civil cuando el gobierno federal se alejó del federalismo y se acercó a un gobierno más centralizado. Al estallar la lucha, los residentes de Saltillo declararon que Monclova había sido convertida ilegalmente en la capital del estado y eligieron un nuevo gobernador. Los tejanos de Saltillo recomendaron establecer un gobierno provisional en Bexar durante los disturbios para reforzar la autonomía de Texas. Juan Seguín, jefe político de Bexar, convocó un cabildo para crear un gobierno, pero se vio obligado a posponerlo cuando las tropas mexicanas avanzaron en dirección a Texas.

DesestructuraciónEditar

En 1835, el presidente Santa Anna revocó la Constitución de 1824 y comenzó a consolidar su poder. En varias partes del país los federalistas se rebelaron, y en mayo de 1835 Santa Anna aplastó brutalmente una revuelta en Zacatecas. Los federalistas, incluido Agustín Viesca, gobernador de Coahuila y Tejas, temían que Santa Anna marchara contra Coahuila después de someter a los rebeldes de Zacatecas, por lo que disolvieron la legislatura estatal el 21 de mayo de 1835 y autorizaron al gobernador a establecer una oficina en otra parte del estado. Viesca fue arrestado cuando viajaba a San Antonio. Cuando Viesca escapó y llegó a Texas, nadie lo reconoció como gobernador. En octubre de 1835, Santa Anna abolió todos los gobiernos estatales, sustituyéndolos por divisiones administrativas de la Ciudad de México. Los colonos de Texas se rebelaron ese mismo mes y, al concluir la Revolución de Texas en abril de 1836, Texas se había autoestablecido como la República independiente de Texas.

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