Como la mayoría de los postres procesados, el helado tiene varios inconvenientes para la salud que hay que tener en cuenta.
Alto contenido de azúcar añadido
No es ningún secreto que el helado está cargado de azúcar.
Muchas variedades contienen entre 12 y 24 gramos de azúcar añadido en sólo una porción de 1/2 taza (65 gramos) (1).
Se recomienda limitar los azúcares añadidos a menos del 10% de las calorías diarias, o unos 50 gramos de azúcar para una dieta de 2.000 calorías (7).
Por lo tanto, una o dos porciones pequeñas de helado pueden empujarle fácilmente hacia este límite diario.
Además, las investigaciones relacionan el consumo excesivo de azúcar con múltiples afecciones de salud, como la obesidad, las enfermedades cardíacas, la diabetes y la enfermedad del hígado graso (8, 9).
Densos en calorías y bajos en nutrientes
Los helados están cargados de calorías pero ofrecen pocos nutrientes – aparte del calcio y el fósforo (10).
Si come helado como un capricho ocasional, no debe preocuparse por su falta de nutrientes. Sin embargo, si sustituye a menudo los alimentos ricos en nutrientes, como las frutas, las verduras o los cereales integrales, por el helado, su dieta podría carecer de las vitaminas y los minerales necesarios.
Además, la alta carga calórica del helado puede favorecer el aumento de peso si se come en exceso.
Puede contener aditivos poco saludables
Muchos helados están muy procesados e incluyen ingredientes como sabores artificiales y aditivos.
Algunos ingredientes artificiales y conservantes se han asociado con efectos negativos para la salud, mientras que otros han demostrado ser seguros.
En particular, la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) prohibió recientemente siete aromatizantes artificiales, incluida la benzofenona, dada su asociación con el cáncer en estudios con animales. Estos compuestos eran comunes en los helados y otros postres (11, 12).
Además, los helados procesados albergan regularmente colorantes alimentarios artificiales, como el rojo nº 3 (eritrosina) y el azul nº 2 (índigo carmín). Aunque están aprobados por la FDA, algunas investigaciones relacionan estos colorantes con la hiperactividad y los problemas de comportamiento en los niños (13).
La goma guar, que se utiliza para espesar y texturizar los alimentos, también es común en los helados. En general se considera segura, pero se ha asociado a efectos secundarios leves, como hinchazón, gases y calambres (14).
Además, las investigaciones en animales y en tubos de ensayo sugieren que la carragenina, también presente en los helados, puede favorecer la inflamación intestinal (15).
Resumen
El helado tiene varios inconvenientes. Es bajo en nutrientes, alto en azúcares y calorías añadidas, y puede contener ingredientes artificiales.
