Me encantan las mascarillas de láminas. Son súper hidratantes, dejan la piel fresca y me dan una falsa sensación de tener mi vida en orden. Así que cuando me enteré del terrible impacto que tienen las toallitas húmedas en el medio ambiente, me sentí como una mala persona por contribuir a ello, y decidí que tenía que dejar de usarlas.

Me encontré con un envase facial que puedo hacer fácilmente en casa, se adapta a la mayoría de los tipos de piel, y es súper fácil de armar.

Crédito de la imagen: Manya Ahuja

Ingredientes:

1 bolsa de té verde usada

2 cucharadas de miel

1 cucharadita de bicarbonato de sodio (evitable para aquellos con piel sensible e irritable)

1 pizca de cúrcuma (opcional)

Método:

Mezcla una bolsita de té verde en una taza de agua caliente, y déjala reposar durante una hora (también puedes usar una bolsita que hayas usado para beber té verde). Una vez que se enfríe, abre las bolsas y saca las hojas en un bol. Mezcla en él la miel y el bicarbonato de sodio. La consistencia del paquete será un poco líquida, pero eso es normal.

Beneficios:

El té verde es rico en antioxidantes y funciona muy bien para las ojeras. Hidrata la piel y tiene propiedades exfoliantes. La miel abre los poros y los limpia, y es estupenda para quienes tienen puntos negros y blancos. La miel también es buena para la pigmentación e hidrata la piel. El bicarbonato de sodio, aunque puede ser evitado por quienes tienen la piel sensible, unifica el tono de la piel.

Esta mascarilla facial puede utilizarse una vez a la semana para obtener los máximos efectos, y funciona igual que una mascarilla de hoja. Sin el elemento añadido de la lámina, también es mucho más sostenible y sólo se tarda un minuto en hacerla, y los que beben verde con regularidad pueden aprovechar también las hojas (poner sólo las hojas en las ojeras hará maravillas para las ojeras y la hinchazón).

Yo también tengo muchas pecas, y cuando aparecen demasiadas en el mismo lugar, parece una mancha oscura. El uso de esta mascarilla iguala esas manchas y aclara la piel también, lo que me funciona de maravilla.

La mascarilla le deja a uno una piel estupenda y fresca, y recomiendo a todo el mundo que la pruebe una vez. Estoy segura de que os convertiréis a las mascarillas de té verde también, y seamos sinceros, os ahorraréis un montón de dinero al no tener que acaparar mascarillas de hoja.

Prueba la mascarilla y dinos si te gusta.

admin

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