Los parásitos son organismos que viven en (o sobre) otro organismo, llamado huésped. Los parásitos pueden ser microscópicos o lo suficientemente grandes como para verlos a simple vista, y sobreviven alimentándose del huésped. También pueden propagar infecciones parasitarias, que pueden conducir a la sepsis.
A veces llamada incorrectamente envenenamiento de la sangre, la sepsis es la respuesta a menudo mortal del cuerpo a la infección. La sepsis mata e incapacita a millones de personas y requiere una sospecha temprana y un tratamiento rápido para sobrevivir.
La sepsis es y el shock séptico puede ser el resultado de una infección en cualquier parte del cuerpo, como la neumonía, la gripe o las infecciones del tracto urinario. En todo el mundo, un tercio de las personas que desarrollan sepsis mueren. Muchos de los que sobreviven quedan con efectos que cambian su vida, como el trastorno de estrés postraumático (TEPT), dolor y fatiga crónicos, disfunción de órganos (los órganos no funcionan correctamente) y/o amputaciones.
Ejemplos de infecciones parasitarias
Algunas personas piensan que las infecciones parasitarias, como la malaria, sólo se producen en los países en desarrollo o en las zonas tropicales, pero las infecciones parasitarias también existen en Norteamérica. Las más comunes que se encuentran en Norteamérica incluyen las infecciones por Giardia (a través del agua contaminada) y la toxoplasmosis (transmitida por los gatos).
Otras incluyen:
- E.vermicularis, o oxiuros
- Trypanosoma cruzi, la causa de la enfermedad de Chagas.
- Equinococosis, otra tenia, que se transmite a través de perros y ovejas
- Cisticercosis, o tenia.
- Toxocariasis, o lombriz redonda.
- Tricomoniasis, una infección de transmisión sexual.
- Amebiasis
¿Cuáles son los síntomas de las infecciones parasitarias?
Los síntomas de las infecciones parasitarias dependen del parásito. He aquí algunos ejemplos:
La infección por Giardia (giardiasis) puede provocar síntomas como diarrea, calambres e hinchazón abdominal, gases, náuseas, fatiga y pérdida de peso. Sin embargo, no todas las personas infectadas presentan síntomas y pueden transmitir la infección a otras personas sin saberlo.
Enfermedad de Chagas: La mayoría de las personas que contraen la enfermedad de Chagas pueden no tener síntomas durante las primeras semanas o meses. Si los tienen, pueden experimentar una leve hinchazón en el lugar de la infección, fiebre baja, dolores corporales, erupción cutánea, dolor de cabeza, náuseas y vómitos, diarrea e inflamación de los ganglios, entre otros síntomas. A continuación, la infección pasa a la fase crónica. Es entonces cuando pueden comenzar los signos y síntomas para aquellos que no tuvieron ninguno durante la fase aguda. Pueden incluir un ritmo cardíaco irregular, insuficiencia cardíaca congestiva, inflamación del esófago que dificulta la deglución y dolor abdominal o estreñimiento. La infección también puede provocar un paro cardíaco.
Tapeworm: Los síntomas de la lombriz solitaria pueden no notarse de inmediato, comenzando sólo unas 8 semanas después de que las lombrices se hayan desarrollado en el intestino. Los síntomas pueden ser leves e inespecíficos, incluyendo náuseas, diarrea, estreñimiento y dolor abdominal. Las tenias no tratadas pueden vivir durante años, y pueden provocar desnutrición. Las complicaciones a largo plazo pueden incluir dolores de cabeza, ceguera y convulsiones.
¿Cómo se diagnostican y tratan las infecciones parasitarias?
El tratamiento de las infecciones parasitarias depende del tipo de infección y del grado de avance de la misma. Los análisis de sangre pueden mostrar la presencia de parásitos como los que causan la enfermedad de Chagas y las muestras de heces (de las deposiciones) pueden mostrar la presencia de parásitos que infectan los intestinos.
Infecciones por Giardia: La infección suele desaparecer por sí sola en pocas semanas. Si la infección es grave o no desaparece, su médico puede recetarle un medicamento como metronidazol (Flagyl), tinidazol (Tindamax) o nitazoxanida (Alinia).
Enfermedad de Chagas: Los medicamentos antiparasitarios benznidazol y nifurtimox eliminan los parásitos, pero pueden ser necesarios otros tratamientos para controlar las complicaciones como las irregularidades cardíacas.
Tapeworm: Los medicamentos más utilizados para eliminar las tenias son el praziquantel (Biltricide), el albendazol (Albenza) y la nitazoxanida (Alinia). Sin embargo, si la infección ha progresado y se ha vuelto más invasiva, es posible que necesite un tratamiento con medicamentos antiinflamatorios, anticonvulsivos, una derivación para drenar el líquido del cerebro o una intervención quirúrgica para eliminar los quistes causados por la lombriz solitaria.
Lombriz redonda: Hay varios tipos de lombriz, por lo que el tratamiento varía según la infección. Los medicamentos más utilizados para la lombriz redonda son el medendazol (Vermox), el albdendazol (Albenza) y la ivermectina (Stromectol). Podría ser necesaria una intervención quirúrgica para eliminar el gusano si hay una obstrucción intestinal.
Prevención
La mayoría de las infecciones parasitarias entran en el cuerpo a través de la boca, ya sea en la comida o la bebida, o por contaminación: tocarse la cara con las manos contaminadas.
- Cuando trabaje cerca de animales o en lugares donde pueda haber heces de animales, incluidos los jardines, utilice guantes y lávese bien las manos cuando termine su tarea.
- Cuando viaje o esté en una zona donde los alimentos o el agua puedan estar contaminados, beba sólo de botellas que hayan sido selladas. Los cubos de hielo pueden no haber sido hechos con agua limpia, así que evite añadir hielo a sus bebidas. Y coma sólo alimentos bien cocinados. La fruta con cáscaras que se han lavado con agua limpia puede ser segura para comer.
- El paludismo puede prevenirse tomando medicamentos antes, durante y después de un viaje a lugares donde se sabe que existe la infección. Hable con su médico antes de partir sobre la prevención del paludismo.
- Nade en piscinas con cloro cuando sea posible. Evite los ríos, lagos o arroyos que puedan tener aguas residuales.
Si sospecha de sepsis, llame al 9-1-1 o acuda a un hospital y diga al profesional médico: «ME PREOCUPA LA SEPSIS».
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Actualizado el 13 de diciembre de 2017
