La ansiedad social es más probable en los adolescentes de 12 a 18 años con TDAH predominantemente inatento y comorbilidades psiquiátricas, según María Jesús Mardomingo-Sanz, MD, PhD, y asociados.

Un total de 234 pacientes con TDAH con una edad media de 14,9 años fueron reclutados para el estudio transversal y observacional, y la ansiedad social se evaluó mediante la Escala de Ansiedad Social para Adolescentes (SAS-A). Algo menos del 70% eran varones; el 37,2% tenía una enfermedad predominantemente inatenta, el 9% tenía una enfermedad predominantemente hiperactiva-impulsiva y el 51,7% tenía una enfermedad de tipo combinado. Casi todos los pacientes recibieron tratamiento farmacológico: el 78,6% recibió metilfenidato, el 15% lisdexanfetamina y el 4,3% atomoxetina, informaron el Dr. Mardomingo-Sanz, de la sección de psiquiatría y psicología infantil del Hospital General Universitario Gregorio Marañón de Madrid, y sus colaboradores. El estudio se publicó en Anales de Pediatría.

Los investigadores descubrieron que el 50,4% de los pacientes tenía una comorbilidad psiquiátrica. Los trastornos del aprendizaje y de la comunicación, y los trastornos de ansiedad fueron los más comunes, presentándose en el 20,1% y el 19,2% de todos los pacientes, respectivamente. Los pacientes de la cohorte obtuvieron puntuaciones significativamente más altas en el SAS-A, en comparación con los valores de referencia de una población sana.

Los pacientes con enfermedad predominantemente inatenta tuvieron puntuaciones significativamente más altas en el SAS-A, en comparación con aquellos con enfermedad predominantemente hiperactiva-impulsiva (P = .015). El trastorno de ansiedad comórbido se asoció con las peores puntuaciones en la SAS-A (P inferior a 0,001).

«La ansiedad social influye en gran medida en la forma en que los niños y adolescentes interactúan con el entorno que les rodea y reaccionan ante él, y por lo tanto puede contribuir al desarrollo de comorbilidades psiquiátricas. La ansiedad social detectada por el cuestionario SAS-A no es diagnóstica de un trastorno de ansiedad, pero detectarla es importante, ya que puede contribuir a la prevención secundaria de futuras comorbilidades que podrían conducir a resultados menos favorables de esta etapa de desarrollo en pacientes con TDAH», concluyeron los investigadores.

Los Laboratorios Farmacéuticos financiaron el estudio, y los investigadores declararon recibir honorarios y ser empleados de Laboratorios Farmacéuticos.

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