En anglosajón, su nombre es Eostre o Eastre. Su nombre ha perdurado en la fiesta de la Pascua, otra fiesta de la primavera, que también trata de la resurrección y el renacimiento, si no de la Tierra, sí de la esperanza y la renovación. De este modo, la diosa Ostara se celebra desde el equinoccio de primavera hasta la Pascua.
Esta diosa tiene que ver con el regreso de la luz y el calor; y con la abundancia de la Tierra cuando se despierta y renace. Los huevos, los conejos, las flores – todos los símbolos de la fertilidad – todos los primeros signos de la primavera – son sagrados para Ella.
Los símbolos de Ostara también se convirtieron en los símbolos de la Pascua, que llegó mucho más tarde.
Los rituales para Ostara incluirían semillas, lo que se desea cultivar y sembrar; plantar un jardín; colorear huevos y dejarlos fuera para los animales que están saliendo de la hibernación; dar un paseo consciente, notando la Tierra cuando empieza a salir de su letargo, respirando la frescura del aire, escuchando el canto de los pájaros y el zumbido de los insectos, sintiendo la luz del sol.
¡Que todos seáis bendecidos por Ostara esta primavera!
