El control del dolor es el objetivo principal de la mayoría de los tratamientos para la endometriosis. A menudo se recomiendan medicamentos para el dolor, tanto de prescripción como de venta libre, y terapias hormonales. La cirugía también es una opción de tratamiento.
Nuevo medicamento oral
En el verano de 2018, la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) aprobó el primer antagonista oral de la hormona liberadora de gonadotropina (GnRH) para ayudar a las mujeres con dolor moderado a severo por endometriosis.
Elagolix es una píldora diaria. Actúa deteniendo la producción de estrógenos. La hormona estrógeno contribuye al crecimiento de las cicatrices endometriales y a los molestos síntomas.
Es importante tener en cuenta que los antagonistas de la GnRH ponen esencialmente al cuerpo en una menopausia artificial. Eso significa que los efectos secundarios pueden incluir pérdida de densidad ósea, sofocos o sequedad vaginal, entre otros.
Opciones quirúrgicas y próximo ensayo clínico
La Endometriosis Foundation of America considera que la cirugía de escisión laparoscópica es el estándar de oro para el tratamiento quirúrgico de la enfermedad. El objetivo de la cirugía es eliminar las lesiones endometriales preservando el tejido sano.
La cirugía puede tener éxito en la reducción del dolor relacionado con la endometriosis, señala una revisión en la revista Women’s Health. Incluso es posible, con consentimiento preinformado, que un cirujano realice una cirugía de escisión para tratar la endometriosis como parte del mismo procedimiento para diagnosticar la condición. Un estudio de 2018 con más de 4.000 participantes descubrió que la cirugía de escisión laparoscópica también era eficaz para tratar el dolor pélvico y los síntomas de la endometriosis relacionados con el intestino.
Un nuevo ensayo clínico en los Países Bajos pretende que la cirugía sea aún más eficaz. Uno de los problemas de los enfoques quirúrgicos actuales es que si las lesiones de endometriosis no se eliminan por completo, los síntomas pueden reaparecer. Cuando esto ocurre, puede ser necesario repetir la operación. Un nuevo ensayo clínico está explorando el uso de imágenes de fluorescencia para ayudar a prevenir la necesidad de repetir las cirugías.