Síntomas de los cálculos biliares

Los tres síntomas más comunes de una vesícula biliar inflamada son hinchazón, náuseas y vómitos. Si estos síntomas se producen con regularidad, la extirpación de la vesícula biliar puede aliviar el dolor.

3 razones adicionales para la extirpación de la vesícula biliar

Aunque los cálculos de la vesícula biliar son la causa más común para una recomendación de cirugía, otras tres condiciones principales son razones comunes por las que un médico sugerirá la cirugía.

Discinesia biliar

Esta enfermedad a menudo se produce cuando la vesícula biliar no vacía la bilis correctamente debido a un obstáculo en el movimiento. Esto suele causar mucho dolor al paciente.

Pancreatitis

La pancreatitis es una situación considerablemente más grave. Se trata de la inflamación del páncreas y puede provocar vómitos y heces sanguinolentas.

Coledocolitiasis

Esta afección se produce cuando los cálculos de la vesícula biliar se han desplazado al conducto biliar pero pueden estar atascados. Esto crea una obstrucción que no permite que la vesícula biliar drene correctamente.

¿Dónde está mi vesícula biliar?

La vesícula biliar se encuentra en el lado derecho del flanco de una persona situada justo debajo del hígado. El propósito principal de la vesícula biliar es el almacenamiento de la bilis. El hígado produce la bilis, que ayuda a descomponer los alimentos y a absorber la grasa. La vesícula biliar almacena la bilis adicional que el hígado produce y libera cuando se digiere la grasa. La vesícula biliar no es necesaria para una digestión saludable, pero se aplican restricciones dietéticas.
La colecistectomía laparoscópica o extirpación de la vesícula biliar se realiza mediante un tubo estrecho con una cámara y suele llevarse a cabo con pequeñas incisiones. El médico podrá ver la vesícula biliar en una pantalla, lo que significa que el tiempo de recuperación es mucho más rápido que el de la cirugía abierta tradicional de la vesícula biliar.

La colecistectomía abierta frente a la mínimamente invasiva

Una cirugía abierta tradicional de la vesícula biliar requiere una incisión de unos 8 centímetros de largo en el abdomen del paciente. La cirugía laparoscópica es considerablemente más pequeña, con 1-3 cortes realizados en la parte superior derecha del abdomen. La vesícula biliar se extrae a través de una de estas incisiones. Los beneficios de la colecistectomía laparoscópica en comparación con la colecistectomía abierta es que los pacientes pueden volver al trabajo mucho más rápido y tienen menos dolor. Estas cirugías ambulatorias tienen mucho menos dolor y un tiempo de recuperación más corto. La cirugía mínimamente invasiva suele requerir menos medicación para el dolor. La colecistectomía tradicional habría requerido una estancia en el hospital de hasta 5 días.

Considerando sus opciones

Hay consideraciones para cada tipo de procedimiento, ya sea laparoscópico o abierto, y éstas incluyen infección, lesión del conducto biliar, así como molestias permanentes, pero estas complicaciones son poco frecuentes. Si un paciente experimenta cálculos constantes en la vesícula biliar o tiene dolor agudo frecuente en la parte inferior derecha del abdomen, se recomienda una consulta con un gastroenterólogo.

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