Por Michelle S. Hunt, PsyD, LCADC
Psicóloga Clínica, Consejera Clínica Licenciada en Alcohol y Drogas
Pérdida de Peso Bariátrica de Virtua
Las personas con adicción a la comida luchan cada día con la pérdida de control o la incapacidad de dejar de comer alimentos con alto contenido de carbohidratos, grasas, sal, azúcar o edulcorantes artificiales. También padecen dolorosos sentimientos de vergüenza y pudor cuando se trata de sus comportamientos alimentarios.
La adicción a la comida es un tema relativamente nuevo. Pero, es una condición compleja que tiene similitudes con otros tipos de adicción, como las drogas, el alcohol, las compras o el juego. Sin embargo, hay ayuda disponible.
Comprender las causas y los signos de la adicción a la comida puede ayudarle a reducir el riesgo y a cambiar los comportamientos potencialmente problemáticos.
¿Qué causa la adicción a la comida?
Consumir alimentos «altamente apetecibles», o alimentos con un alto contenido en carbohidratos, grasas, sal, azúcar o edulcorantes artificiales, activa los centros de placer del cerebro y libera sustancias químicas que nos hacen sentir bien, como la dopamina y la serotonina. Estos alimentos afectan a la misma zona del cerebro que las drogas, el alcohol y comportamientos como las compras o el juego.
Los alimentos muy apetecibles suelen contener sustancias no naturales o niveles más altos de lo normal de sustancias naturales que su cuerpo y su cerebro no pueden procesar. Esto hace que su cuerpo se inunde de sustancias químicas que le hacen sentir bien.
Para ayudarle a mantener o recrear esas buenas sensaciones, su cuerpo y su cerebro comenzarán a desear alimentos muy apetecibles. Y, como su cerebro ajustará sus receptores para compensar el torrente de sustancias químicas, acabará necesitando consumir cantidades cada vez mayores de alimentos muy apetecibles para obtener la misma reacción de bienestar.
Riesgos de la adicción a la comida
Como todo el mundo debe comer para sobrevivir, cualquiera puede desarrollar una adicción a la comida. La sobreexposición a alimentos muy apetecibles puede aumentar el riesgo de desarrollar una adicción a la comida, y las personas que se sobreexponen a una edad temprana tienen un riesgo aún mayor. Las personas que utilizan la comida para lidiar con el estrés o cambiar su estado de ánimo también tienen un mayor riesgo.
Los estudios también muestran que hay genes que ponen a las personas en un riesgo superior a la media de desarrollar cualquier tipo de adicción. Cuantos más genes «adictivos» tenga una persona, más probable será que luche contra la adicción a la comida, a otra sustancia o a un comportamiento.
Signos de adicción a la comida
Uno de los principales signos de adicción a la comida es la pérdida de control sobre los comportamientos alimentarios, especialmente cuando se trata de ciertos alimentos muy apetecibles. Si siente que quiere parar pero no puede; come hasta el punto de sentirse mal; o, se siente avergonzado o culpable por su forma de comer, puede estar sufriendo una adicción a la comida.
Las personas que sufren adicción a la comida también pueden necesitar comer una gran cantidad de alimentos para sentirse satisfechas, lo que puede provocar un aumento de peso. Sin embargo, algunos mantienen un peso normal. También es habitual que experimenten síntomas de abstinencia cuando dejan de comer un determinado alimento. Los síntomas de abstinencia incluyen los siguientes:
- Antojos
- Dolores de cabeza
- Irritabilidad
- Inquietud
La adicción a la comida también puede afectar a sus relaciones y vida social. Las personas con adicción a la comida pueden tener problemas en el trabajo o en la escuela, perder el interés por las actividades que solían disfrutar, evitar eventos sociales o aislarse de sus familiares y amigos.
Cómo prevenir o superar la adicción a la comida
La adicción a la comida es difícil de prevenir porque es imposible evitarla. Sin embargo, una de las mejores estrategias es evitar la sobreexposición a los alimentos apetecibles mediante una dieta sana y equilibrada, rica en alimentos naturales y no procesados. Llevar una dieta equilibrada y conocer las señales de advertencia de la adicción a la comida le ayudará a actuar rápidamente si sospecha que existe un problema.
Superar la adicción a la comida suele implicar seguir el mismo modelo que se utiliza para tratar otros tipos de adicciones, y necesitará un plan sólido y mucho apoyo.
- En primer lugar, tendrá que desintoxicar su cuerpo evitando los alimentos desencadenantes, como la comida rápida o los alimentos con azúcar procesado. Durante este tiempo, puede experimentar síntomas de abstinencia que pueden ir de leves a graves.
- Después de desintoxicar su cuerpo, tendrá que trabajar en el cambio de sus comportamientos alimenticios. Es posible que tenga que evitar ciertas personas, lugares (como restaurantes), situaciones y alimentos que intensifican los antojos o le hacen más propenso a consumir el alimento problemático. También es posible que tenga que romper las asociaciones entre los alimentos y las rutinas o los acontecimientos, como comer helado antes de acostarse o tomar palomitas de maíz con mantequilla en el cine.
- Otras estrategias que pueden ayudar incluyen el seguimiento de su consumo de alimentos, la planificación previa de sus comidas y comer con atención.
Aunque algunas personas pueden reintroducir gradualmente pequeñas cantidades de alimentos problemáticos en sus dietas, otras personas deben evitarlos indefinidamente para mantener el control sobre su adicción a la comida. Debe prestar mucha atención a cómo responde su cuerpo a los alimentos problemáticos para decidir qué estrategia de control a largo plazo es la adecuada para usted.
Si necesita apoyo profesional para ayudarle a perder peso, hable con su médico de atención primaria para ver qué opciones pueden ser adecuadas para usted.
Desde los exámenes rutinarios hasta el control de las enfermedades crónicas, los proveedores de atención primaria y especializada de Virtua son sus socios en la atención. Llame al 888-847-8823 para concertar una cita.
Actualizado el 15 de diciembre de 2020
