El patrocinio fiscal: Un recurso oculto para los emprendedores sin ánimo de lucro
«La primera etapa de las nuevas empresas sin ánimo de lucro no sólo consume mucho tiempo y exige un amplio compromiso por parte del emprendedor sin ánimo de lucro, sino que también es la etapa más frágil en la vida de una organización sin ánimo de lucro»
«Las organizaciones sufren un mayor riesgo de fracaso porque los emprendedores deben realizar muchas actividades vitales de forma más o menos simultánea, lo que a menudo acaba siendo una tarea abrumadora»
«El patrocinio fiscal: Una visión equilibrada
«El patrocinio fiscal es una opción que puede estar al alcance de una persona, grupo o empresa para atraer fondos benéficos sin necesidad de crear una organización sin ánimo de lucro. Puede permitir que un artista individual financie la creación de un mural, que un grupo lleve a cabo una campaña de crowdfunding para la investigación del cáncer pediátrico o que un fabricante cree y distribuya productos en las regiones devastadas por un desastre natural reciente.»
Alternativas a la formación de una organización benéfica sin ánimo de lucro
«Es probable que una gran mayoría de individuos y grupos interesados en formar una organización sin ánimo de lucro nunca hayan considerado, ni siquiera oído hablar, del patrocinio fiscal. Sin embargo, el patrocinio fiscal puede ser una alternativa muy atractiva a la formación de una organización sin ánimo de lucro, especialmente cuando la sostenibilidad de una entidad independiente es muy cuestionable o el proyecto benéfico tiene una vida relativamente corta. Los patrocinadores a menudo sirven como incubadoras de proyectos que posteriormente se escinden cuando sus respectivos iniciadores de proyectos determinan que pueden gobernar y operar organizaciones independientes sostenibles. Los abogados que asesoran a los posibles fundadores de organizaciones sin ánimo de lucro que parecen no estar suficientemente preparados para crear una organización sostenible deberían informar a sus clientes de la alternativa del patrocinio fiscal».