En nuestra clínica de Madrid tenemos un gran número de consultas sobre muelas con infección. Sin duda el hecho de tener infección en la muela provoca dolor y molestias que obligan a la persona a acudir a un profesional para un examen y valoración de la pieza afectada.
Por nuestra experiencia, si se acude a la clínica cada seis meses o un año para revisar la dentadura, hay una alta probabilidad de detectar cualquier tipo de problema, entre ellos las muelas infectadas, de ahí que siempre recomendamos visitar periódicamente al dentista y, sobre todo, tener una buena higiene bucodental diaria que incluya cepillado de dientes, uso de hilo dental y enjuagues bucales.
El dolor de muelas típico tiene que ver, en la mayoría de los casos, con muelas infectadas. Muchos dicen que es uno de los peores dolores que puede padecer una persona, dada su intensidad y persistencia. Hasta que se soluciona el problema el dolor se convierte en el centro de la existencia de la persona que lo tiene y es difícil llevar una vida normal.
Pero, aparte de la infección en las muelas, hay dolores de muelas relacionados con otras dolencias como pueden ser las temidas muelas cordales, o también llamadas «muelas del juicio», que suelen tener falta de espacio cuando erupcionan y originan muchos problemas. La mayoría de las veces es preciso extraerlas y originan dolor y molestias al paciente. Sin embargo, las muelas con infección son la principal causa del dolor de muelas. Vamos a analizar sus causas.
Causas de la infección de una muela
Normalmente una muela se infecta debido a la proliferación de bacterias que consiguen destruir alguna parte de las mismas, incluso pueden llegar a la raíz de la pieza. La existencia de bacterias puede deberse a varias causas:
Caries
Es una de las principales causas de infección de muelas, ya que las bacterias llegan hasta la pulpa de la pieza y si no se trata a tiempo pueden penetrar incluso hasta el hueso. Normalmente se recurre a un empaste o a un tratamiento de endodoncia para reparar los conductos radiculares y devolver la funcionalidad a la muela.
Enfermedades periodontales
La gingivitis (inflamación de las encías) debe tratarse cuanto antes para evitar que la afección se convierta en periodontitis, una enfermedad más seria que requiere un tratamiento complejo. Por tanto, es muy importante que al primer síntoma de inflamación de encías se acuda al especialista para evitar que la periodontitis avance y llegue incluso a afectar el hueso de sujeción de los dientes con la formación de las bolsas periodontales.
Traumatismos
Las bacterias tienen más fácil penetrar en dientes que se han roto o astillado por algún traumatismo. Debido al golpe se crean pequeñas grietas en el diente que permiten el paso de bacterias, por eso es imprescindible, si se ha tenido algún tipo de traumatismo en la dentadura, acudir a un odontólogo que examine la situación de la pieza afectada. De esta forma se podrá actuar con rapidez y evitar la aparición de agentes patógenos externos.
Lesiones con objetos punzantes
Puede suceder que se produzcan heridas en la boca con objetos punzantes, como un tenedor o un cuchillo, un bolígrafo (en caso de mordisquearlo, por ejemplo), o cualquier otro elemento. Cuando se produce una herida en el interior de la cavidad bucal es un buen reclamo para la aparición de bacterias que intentarán colonizarla cuanto antes. De ahí la importancia de acudir a una clínica para que el profesional evite la infección con el tratamiento adecuado.
Síntomas de una muela infectada
El principal síntoma de que una muela está infectada es la aparición de un absceso como consecuencia de una inflamación y acumulación de pus. Además, el paciente nota un dolor muy intenso y persistente en la muela que aumenta cuando se mastican alimentos. También puede ir acompañado de otros síntomas como los siguientes:
- Sangrado de encías
- Mal aliento
- Dolor en el oído
- Mal sabor de boca
- Fiebre
- Dolor de garganta
- Sensibilidad dental, tanto al frío como al calor
- Mandíbula inflamada
- Inflamación de ganglios del cuello
- Mejilla inflamada
Tratamientos para curar muelas infectadas
El tratamiento que decida el odontólogo dependerá del origen de la infección. Para ello, una vez hecho el diagnóstico pertinente, el principal objetivo será controlar cuanto antes la infección para evitar más problemas y, sobre todo, para bajar la inflamación y calmar el dolor del paciente. El dentista recetará los antibióticos que considere necesarios para eliminar la infección.
Es importante recordar que no se deben tomar antibióticos por cuenta del paciente sin haber sido examinado antes por un especialista. Aunque sea un antibiótico recetado en anteriores ocasiones, no tiene por qué ser eficaz en la infección actual, de ahí la importancia de que el fármaco sea prescrito por el odontólogo.
Junto al antibiótico, el dentista también puede considerar necesario pautar un analgésico para rebajar la inflamación o también recomendar algún tipo de enjuague bucal para minimizar el dolor. Si la infección es importante, el profesional siempre optará por salvar el diente y decidirá un tratamiento conservador como endodoncias, empastes o lo que considere necesario.
En caso de que no sea posible, la extracción puede ser otra posibilidad si hablamos de muelas del juicio o si la infección es tan importante que no es posible salvar la muela.
¿Hay remedios caseros para las muelas infectadas?
Como hemos dicho en otras ocasiones, no recomendamos el uso de remedios caseros para calmar el dolor de muelas y mucho menos para tratar una muela infectada. En realidad, se utilizan estos medios para retrasar la visita al dentista o incluso tratar de evitarla a toda costa. Sin embargo, él es el encargado de valorar el estado de la muela, detectar el problema y decidir el tratamiento más efectivo para solucionarlo.
En Internet podemos encontrar remedios cómo colocar clavo en la muela afectada, una aspirina, bicarbonato, alcohol, bolsas de té o incluso agua oxigenada… Muchos de estos componentes pueden quemar los tejidos blandos si se ponen directamente sobre la muela afectada y lo más probable es que originen más problemas de los ya existentes. El ácido acetilsalicílico que contiene la aspirina es especialmente peligroso para las encías y no debe tener contacto en ningún momento con los tejidos blandos de la boca.
En el caso de las bolsas de té o el clavo, aun siendo remedios naturales que no afectan negativamente a la dentadura, solo sirven para aliviar el dolor pero nunca curarán la infección de la muela. El profesional será el encargado de tratar las muelas infectadas y también de recomendar algún remedio casero que pueda beneficiar el proceso de curación.
En nuestra clínica dental de Madrid le trataremos como se merece para tratar una muela infectada o cualquier otro tipo de afección bucodental. No dude en contactar con nosotros para resolver cualquier duda o consulta relacionada con su problema. Para nosotros, su salud es lo más importante.