El COVID-19 exacerbó los problemas de comunicación de la pareja, dice Taylor. El exceso de unión, la falta de espacio personal y la imposibilidad de realizar actividades normales, como ir al gimnasio, fueron perjudiciales, dice.

«Simplemente magnificó los problemas que teníamos porque no podíamos pasar tiempo alejados el uno del otro», dice Taylor.

Los divorcios por la pandemia pueden estar aumentando

Hay algunos indicios de que el coronavirus y sus factores de estrés relacionados están separando a algunas parejas. Legal Templates, un sitio web que ofrece documentos legales gratuitos y a la venta, observó un aumento del 57% en el interés por los documentos de separación de la empresa de febrero a abril. Los datos de la empresa mostraron que las parejas casadas en los últimos cinco años, las que tienen hijos menores de 18 años y las parejas de los estados del sur parecían buscar los documentos de divorcio con más frecuencia que otras.

Una encuesta separada de 300 parejas, realizada por la herramienta demográfica Lucid, encontró que el 41 por ciento cree que la COVID-19 es probable que aumente las discusiones, y el 35 por ciento cree que es probable que aumente las tasas de divorcio.

Los adultos mayores no son inmunes a estos problemas matrimoniales. Una encuesta realizada en 2020 por The Senior List, un sitio web dedicado al estudio del envejecimiento, descubrió que el 17 por ciento de 191 personas mayores emparejadas dijo que el COVID-19 tenía un efecto «algo negativo» o «muy negativo» en sus relaciones. En la encuesta, los encuestados mencionaron las restricciones a la actividad y los viajes, el estrés familiar, las precauciones ante el COVID-19 y la política entre los principales problemas que causan conflictos matrimoniales.

Evite que los matrimonios se acaben

Aunque es evidente que la pandemia está estresando a las parejas, hay formas de evitar los problemas, dice Katherine Friedman, consejera profesional licenciada con sede en Portland, Oregón. Friedman está recibiendo más solicitudes de terapia de pareja este año y está trabajando con sus clientes para resolver los problemas relacionados con la pandemia.

Durante las típicas sesiones previas a la pandemia, «normalmente una de las personas se siente mejor, está más descansada y tiene dificultades con su trabajo. La otra no», dice Friedman. «Al igual que en la relación de Taylor, Friedman observa que «los problemas de comunicación a largo plazo se están agudizando».

Recomienda a las parejas que traten de ser más conscientes, abordando los sentimientos a medida que surgen en lugar de reprimirlos hasta que se produzca un «gran estallido».

Friedman también anima a las parejas a mantener conversaciones amables sobre cómo se sienten con sus cónyuges. Las parejas deben reducir sus expectativas mutuas, ya que es posible que no puedan apoyarse mutuamente de la misma manera que lo hacían antes de la pandemia.

Incluso con terapia y trabajo duro, algunas relaciones no sobrevivirán a esta época inusualmente estresante. Pero hay maneras de hacer que el final de los matrimonios sea menos contencioso, dice la abogada de divorcios con sede en Miami Christina McKinnon, quien dice que ha visto un aumento en las separaciones entre parejas de más de 50 años con matrimonios que duran más de una década.

Los matrimonios de larga duración pueden hacer que los divorcios sean complicados, con muchos activos adquiridos para dividir. «Sepa cuáles son sus activos», dice McKinnon. «Miren hasta el final, liberen la ira y sigan adelante»

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